Sublime sabor embriagador
Que detienes el tiempo y haces perder el sentido
Que palias los llantos y alegras momentos
Que embelesas al sabio y entretienes al necio
Que no entiendes de clases, ni de estatus. A todos llegas y enganchas
Déjame saborearte, deleitarme en tus texturas, en tus triples chocolates
Y así, sin darme cuenta, te me acabas otra vez.
Llega el arrepentimiento y las ganas de paladearte de nuevo